martes, 21 de octubre de 2008

Cartas sin rumbo...

Muerte, sin más...

Nos ven nacer, educarnos al cobijo de nuestros padres. Madurar e independizarnos como antes vieron volar a sus hijos. Para que a continuación nosotros mismos los veamos irse a otro mundo mejor.

Los padres de nuestros padres. Abuelos sin más. Personas al fin y al cabo.

Es duro, ver a tus familiares tristes, llorosos. Ninguno tenemos el perdón. Nacemos para morir. De la muerte de un familiar muy cercano aprendemos a valorar nuestra propia vida. Cómo se dice… Alguien debe de morir para que los demás, valoremos la esencia de la vida.

Padres, hermanos, tíos, primos, sobrinos, cuñados, suegros, nietos, biznietos… Familiares todos ellos. Venidos todos de la unión de dos personas. Del cariño, respeto, sinceridad, fruto del amor conyugal, fraternal, familiar…

Estar dentro de esta atmósfera me hace sentir frustración, tristeza… Tristeza de pasear y ver a mí alrededor injusticia. Injusticia y egoísmo que van dadas de la mano, cuando decimos, ¿por qué a él, madre…? ¿Por qué te lo llevas….por qué…? Escuchar esas palabras de un familiar, me hace estremecerme, sumergirme en un letargo rápido y silencioso, un flash back de emociones se apiada de mi, no puedo evitar volar por mi mente y recordar ese cariño, ese amor que repartió por donde quiera que fuera…

Javie
®omán 2008



Cartas a mi otro yo.


He decidido escribir esta carta para poder expresarte mis más profundos sentimientos. Tu imagen es la primera y última que veo y recuerdo cada día. Entiendo que ahora estemos en fase de conocernos, por decirlo así.
Es un gran placer volver a estar dentro de ti, y ahora no quisiera volver a dejarte escapar. Sé que en el pasado me porte mal contigo, y te pido perdón por ello, por eso ahora no quiero que nos pase nada malo, sino todo lo contrario, que cada día que pase te pueda robar un abrazo, una acaricia o un beso.

He pasado tanto tiempo pensando..., pero he decidido que no voy a forzar nada, que lo que tenga que venir que venga, ya sea bueno o malo.
También te quiero dar las gracias por haberme ayudado a encontrar otra vez el sentido de nuestra vida, mi vida. Y por todas esas veladas tirados en la cama sin poder dormir.
Gracias a ti he vuelto a confiar en el mundo, y darme cuenta que todavía existen personas de verdad, sinceras y guapas como tú.

También puedo decirte que tú has sido una sorpresa, de las cuáles no se encuentran todos los días, y yo gracias a alguien la he encontrado. Siempre he estado esperando el día en poder conocerte tan de cerca. Ahora que lo he hecho puedo decir que mi corazón has invadido. Ahora mismo siento que quiero estar a tu lado, porque cada vez que estoy cerca de ti o cada vez que pienso en ti, me siento cómo dentro de una burbuja, sin saber el camino y sin saber hacía donde voy.

A lo mejor, piensas que esta carta es una tontería, si piensas así, ¡lo siento! Porque, como sabrás, soy demasiado tímido para decírtelo a la cara.

Desearía entregarme a ti por entero, pero ¿y tú reacción? Que sería de mí. Por eso te pido que nunca olvides esta carta que sinceramente y con miedo escribo, para que nunca te olvides de mí, y de lo que por ti siento.

Creo que he sido bastante claro y espero que, si tienes alguna duda, acudas a mí, porque ante todo soy tu compañero y puedes contar conmigo siempre que me necesites.

Espero que hayas entendido mi mensaje, que sobre todo se basa en mi agradecimiento por estar dentro de mí.

Te pido que no te olvides de mí, porque yo no me olvidaré de ti.
{ Nunca… }

Besos, siempre te querré...



Javie®omán 2008



La vida


A lo largo de la vida vamos conociendo muchas formas de vida, diversos arquetipos de pensamientos, culturas y razas…

De la misma forma en la que los vamos rozando y percibiendo, nosotros mismos vamos creciendo, madurando… En nuestra gran vida que a su vez es corta e intensa.

Nacemos sin saber lo que el mundo nos va a dar o lo que nosotros esperamos que nos dé. En la plenitud de la adolescencia nos creamos símbolos o formas de ver la vida, nuestros grupos de amigos, nuestra familia, todo eso que nos va imponiendo poco a poco nuestra sociedad. Pero son pocas las personas que a la vez que van creciendo y madurando se dan cuenta de lo que tienen o de lo que quieren…

No tengo mucha experiencia sobre vida porque me considero un chico joven aún...

Pero por lo poco que se, por todo lo vivido hasta el momento y lo que me queda por vivir. Sólo seguro de una cosa estoy… Que todo lo que tengo, todo lo que tendré, y seré… Pequeñas cosas que llenan mi vida… ¡Más ya diría yo! que mi vida llena está de todo lo que realmente necesito… Amigos de verdad y una familia que me hace ser el rey de mi casa, ¿necesito algo más? ¿Entras…?


Javie®omán 2008



Polvo...


De uno o varios polvos venimos, y en millones de fragmentos de dicha sustancia algunos como yo, terminaremos… Venidos todos a un mundo… Dejados todos por ese mismo. Unidos mediante un factor común. Vida o muerte. Elige.

La vida y sus metáforas más macabras. Creer o ver. ¿Realmente creemos en algo? Somos conscientes de lo que somos, seremos o esperamos ser... Vivimos con temor o con desazón.

Somos burgueses de nuestra vida. Monárquicos nada más… Republicanos de nuestros sentimientos y anarquistas ante los demás. Creadores de falsas esperanzas. Ilusionistas de formas de vida. Eso somos y eso seremos… Simplemente la leña arde…


Javie®omán 2008


lunes, 6 de octubre de 2008

Poesías.

Amor Ausente


Siento cómo, poco a poco, nos alejamos.

Veo, cómo hemos perdido

El cariño del primer día.

Lloro, porque al pensar en ti

Noto tu ausencia.

Inunda en mi mente esa

Idea de morir, desaparecer…

Por no poder estar junto a ti.

Quisiera comprender, el sentimiento

Que nos separa.

Pero por más, pensar y pensar

No logro llegar a rescatar,

El amor que por ti tenía.

Sólo decirte,

Que la misma luz

Que nos junto, es

La misma que ahora nos separa.


Javier Román David



Perdidos


Vi como te estaba perdiendo,

Note tu ausencia con la mía.

No quise darme cuenta

Pero tu amor no me correspondía.

Mis lágrimas sellaron

Mi corazón de por vida.

Tú mirada no era tierna

Aún así sentía,

Que tu eras la persona

Que más quería.

Ahora que no te tengo

Mi corazón no te olvida,

Por aquellos momentos

Que distes a mi vida.

No más que decir

Ya que lloraría,

Un abrazo muy fuerte

Para el amor de mis días.

Javier Román David